La oposición acusa a Armengol de «comprar votos» mediante el reparto de subvenciones
Toni Costa (PP): "Armengol sigue sin entender que la mejor forma de ayudar a familias y empresas es bajar impuestos"
Josep Melià (PI): "Todo son ayudas y subvenciones pero falta una apuesta clara por los emprendedores"
Patrricia Guasp (Cs): "Este reparto del dinero público es electoralista y se debería hacer un reparto de riqueza, no de pobreza"
Armengol basa su plan contra la crisis en el reparto de paguitas y subvenciones en año electoral
El discurso de la presidenta de Baleares, Francina Armengol, en el que ha realizado un sinfín de anuncios sobre nuevas ayudas, subvenciones, incentivos y pagas ha dejado en un primer momento noqueada a la oposición, que esperaba una intervención más centrada en el autobombo y el análisis de los tres años y medio de legislatura. El PP, Ciudadanos y el PI han coincidido en criticar el modelo de Armengol para hacer frente a la inflación basado en una economía subvencionada y el reparto de paguitas en un año elecotral.
Vox ha preferido no hacer declaraciones alegando que reserva su postura para el debate de este miércoles. Sí se han pronuciando el PP, Ciudadanos y el PI. El portavoz del PP en el Parlament, Toni Costa, ha declarado que “Francina Armengol ha anunciado la campaña electoral más cara de la historia”.
“Armengol nos ha anunciado hoy que hará en ocho meses todo lo que no han hecho en ocho años. La credibilidad de las medidas anunciadas se consolida o no en función de los avales que presentas. Y el aval que presenta hoy Francina Armengol no reafirma en absoluto los anuncios y la credibilidad de las medidas que ha puesto sobre la mesa”, ha advertido Toni Costa.
El portavoz del PP ha asegurado que “Francina Armengol sigue sin
entender que la mejor forma de ayudar a las familias y a las empresas
de Balears es bajándoles los impuestos. Esta es la mejor forma de ayudar. Cuando el dinero está dentro del bolsillo de los ciudadanos, son los ciudadanos quienes lo administran como estiman más conveniente”.
“Desde el Partido Popular siempre seremos más partidarios de que sean
los ciudadanos y las empresas quienes administren su dinero, a que lo
haga Francina Armengol”, ha dicho Costa.
Según el portavoz del PP “Francina Armengol prefiere vaciar los bolsillos de los ciudadanos para pagarse la campaña electoral y esto no podemos admitirlo”, ha advertido Costa. “Nada se ha dicho hoy, ni una sola referencia, sobre la gestión de los servicios públicos y la gestión hecha hasta hoy por Armengol es bastante deficiente. Nada hemos oído respecto a cómo mejoraremos la gestión de la sanidad, la educación, de las infraestructuras. Muchos anuncios y pocas realidades”, ha criticado Toni Costa.
“En vez de venir aquí a hacer anuncios y campaña electoral, Francina
Armengol debería haber venido aquí a hacer balance de legislatura, de
los últimos ocho años. Y esto es lo que mañana hará el Partido Popular”,
ha avanzado el portavoz del PP.
Toni Costa ha añadido que, “todo y que Francina Armengol ha copiado
al alguna de las medidas que ha propuesto el PP, sigue en su línea de
siempre. La de una economía subvencionada. Esta es su forma de
afrontar los problemas económicos, subvencionar la economía.
Nosotros pensamos que debe ser la iniciativa privada quien tire de la
economía y no el dirigismo, el intervencionismo y la subvención pública”.
Ciudadanos
La portavoz parlamentaria de Ciudadanos , Patricia Guasp, ha considerado que el discurso de este martes de la presidenta del Govern, Francina Armengol, ha estado entre «una investidura y un acto electoral».
La diputada de Ciudadanos ha criticado especialmente la cantidad de anuncios que ha realizado la líder del Ejecutivo. «Nos tiene acostumbrados a hacer anuncios pero lo de hoy ha sido inigualable», ha indicado Guasp, quien ha calificado a la presidenta como «armengolmilanucnios.com».
Guasp ha expresado su «decepción» porque, según ha dicho, todas las medidas anunciadas ya se podrían haber lanzado en marzo «para aliviar los bolsillos» de los ciudadanos. Sin embargo, ha lamentado, «ha esperado a lanzar un plan de choque cuando llevamos muchos meses con muchas familias y autónomos sufriendo».
Además, la portavoz de la formación naranja ha asegurado que «echa en falta» un ajuste en la administración y una racionalización del gasto público. Por el contrario, la presidenta «va a regar con ayudas y subvenciones» a los ciudadanos, según Guasp.
Para la diputada de Ciudadanos, este «reparto del dinero público» por parte de Armengol tiene una intención «electoralista» y se debería hacer «un reparto de riqueza, no un reparto de pobreza».
También ha censurado que la presidenta «ha tardado una hora y diez minutos» en hablar de innovación y vivienda. «No vemos inversiones, no vemos ambición para otros sectores», ha indicado la diputada de Ciudadanos, quien cree que Armengol «ha tirado del comodín de anuncios reciclados».
El PI
El portavoz del PI en el Parlament balear, Josep Melià, ha lamentado que la «filosofía» de la presidenta del Govern, Francina Armengol, «sea la de una economía subvencionada». Ésta ha sido la lectura que ha hecho el PI del discurso de Armengol en la primera sesión del Debate de Política General de 2022 en el Parlament.
«Todo son ayudas y subvenciones pero falta una apuesta clara por los emprendedores. La economía se basa en empresas, autónomos y en gente que pone en marcha una actividad», ha argumentado el diputado, alertando de que una economía «que sólo está subvencionada, dirigida y planificada desde el Govern no tiene recorrido a largo plazo».
Además, el PI ha reprochado a Armengol que su discurso estaba lleno de «muchísimas promesas, muchos anuncios, pero muy pocas realidades». En este sentido, ha razonado que después de siete años y medio de su presidencia la vivienda es «mucho más cara» en Baleares; que en estos años no se ha hecho «ningún metro» de red ferroviaria nueva; y que la Comunidad continúa «dependiendo absolutamente del turismo».
«Más allá de discursos, palabras, promesas y buenas intenciones, la realidad no va por donde nos indica la presidenta», ha denunciado Melià.
Finalmente, el diputado ha razonado que «el régimen fiscal especial no existe», sino que «lo que hay es una promesa de que en los presupuestos estatales de 2023 habrá dos medidas fiscales que van en buen camino». «Pero esto no es un régimen fiscal ambicioso, completo y de largo recorrido», ha advertido, cuestionando si dichas medidas tendrán «continuidad independientemente de si se aprueban o no los presupuestos» o se produce un cambio de color político en el Gobierno en el futuro.